De vuelta al homeschooling, aquí estamos…
La verdad es que en los últimos meses del ciclo escolar anterior la pasé muy mal.
Lidiar con la cantidad de trabajo que propusieron los maestros para mis enanos (bueno y para todos sus compañeros) fue muy complicado.
Y no era sólo el hecho de que fuera (o a mí me pareciera excesivo) sino el tener que lidiar yo con ello.
Me he cansado de decir que no todos los niños son iguales y por lo tanto no todos serán «buenos» o tendrán la misma facilidad para todas las materias. Pues como mamá pasaba exactamente lo mismo.
Para empezar, no soy maestra
Con esto quiero decir que no tengo la preparación, la vocación ni la paciencia para enseñar a niños y, mucho menos, a adolescentes. Mucho menos para impartir las chorrocientas materias que tenía cada uno. Tenía que investigar demasiado sobre todas para poder apoyar a mis enanos.
Este ciclo de vuelta al homeschooling será diferente
En principio, porque estoy convencida que aquellos meses fueron de experimentar, tanto para niños como para papás y maestros. Creo que a estas alturas, los maestros ya estarán perfectamente preparados, tanto a nivel digital como profesional, para cumplir con su trabajo; nosotros como papás ya no estaremos tan presionados por cumplir con funciones que no nos corresponden y los niños estarán más familiarizados con el sistema de educación.
Espero y deseo que cada quien asuma su papel
Lo dije antes y lo sostengo, yo no quería homeschooling, por eso mis enanos estaban y están en un colegio en el que pago por ciertos servicios que se me ofrecieron al momento de inscribirlos, así que eso es lo que sigo pidiendo y exigiendo, porque sigo pagando por lo mismo.
Yo, como mamá, no tengo que cumplir con ningún trabajo; primero porque no me pagan por ninguno de ellos y segundo, porque ser mamá no es un trabajo fue, es y seguirá siendo una elección. Yo elijo ser la mejor mamá posible para mis enanos y hago todo para mejorar cada día.
No permito, ni permitiré que nadie decida si soy o no una buena mamá, eso no lo puede decir nadie; cada quien sabe y, en su momento, los únicos que podrán tener una opinión al respecto serán mis enanos.
En este nuevo ciclo me he propuesto no ponerme en el papel de nadie, yo sé qué es lo que me corresponde a mí como su guía, pero en cuestión académica, literalmente, me lavo las manos. En ese sentido, la responsabilidad es de sus maestros y de ellos.
Mis enanos siempre han sido muy responsables y no dejarán de hacerlo porque la situación sea diferente, pero no harán el trabajo de otros y yo tampoco. Cada quien asumirá su rol y lo desempeñará de la mejor manera posible, pero ya no me estresaré de más por cosas que no me corresponden y tampoco los presionaré a ellos con cosas que no les tocan.
Ahora será un poco más sencillo mantener esa actitud porque sólo me queda un enano en el colegio, el otro, se va a la universidad y está en ese proceso.
Siendo totalmente honesta, todavía no he logrado organizar el homeschooling con ser ama de casa y emprendedora on line, pero estoy segura que poniendo cada cosa y a cada persona en el lugar indicado, las cosas se irán dando poco a poco y por inercia.
Por lo pronto, el inicio va bien. Pero también es cierto que están en la semana de presentación y repaso; lo que me encanta, es que por fin, tienen clases todos los días y con un horario establecido por materia. Eso hará que vuelvan un poco a establecerse rutinas de aprendizaje y trabajo en casa.
Veremos como marcha todo, de momento, tengo claro que mientras, a nivel académico, se cumpla con lo correspondiente, en casa se hará lo mismo.